PLATINO

Nombre: Platino 

Símbolo: Pt

Grupo: 10

Período: 6

Bloque: d

Categoría: Metales de transición

Número atómico: 78   

Masa atómica: 195,084  u

Electrones por capa: 2, 8, 18, 32, 17, 1

Electronegatividad: 2,28

Densidad: 21,45 gr/cc

Punto de Fusión: 1768ºC

Punto de Ebullición: 3825ºC

Conductividad Térmica: 71 W (m·K) 

Conductividad Eléctrica: 9,4 × 10^6 S/m 

Orden Magnético: Paramagnético

Estado Ordinario: Sólido

Estados de Oxidación: +2, +4

Dureza Mohs: 3,5

Dureza Vickers: 549 MPa

Dureza Brinell: 392 MPa

Isótopos más estables: Pt-190 (0,012%), Pt-192 (0,782%), Pt-194 (32,864%), Pt-195 (33,775%), Pt-196 (25,211%) y Pt-198 (7,356%)

Descubridor: Antonio de Ulloa, español (1735)


El Platino es uno de los tres elementos descubiertos o que han sido parcialmente (tal es el caso del Vanadio) descubierto por españoles. 

El general de la marina española Antonio de Ulloa, sevillano, notificó la presencia de lo que él pensaba era una forma alternativa de la Plata a la que llamo inicialmente “Platina” (como diminutivo) en minas de Colombia, en compañía de un colega de nombre Jorge Juan y Santacilia. No obstante, sería el propio Ulloa quien se volcaría en el estudio de éste nuevo metal, que había encontrado de forma nativa (el Platino es noble y aparece de forma muy pura en la corteza terrestre) lo que le respaldaría como el descubridor el elemento. 

Fue el primer científico autodidacto en fundar un museo de historia natural, y también el primer laboratorio de metalurgia (oficial y con conocimiento de la Corona) en España.

El nombre original con el que Ulloa bautizó al metal ha prevalecido hasta nuestros días y obedece al hecho de que para él se asemejaba a la Plata más que a ningún otro metal conocido en la época (hablamos de mediados del siglo XVIII). 

 


Características principales

El Platino es un metal noble, precioso, sólo por detrás del Oro en ambas propiedades, de color plateado “acero”, muy dúctil y maleable, algo blando (3,5 Mohs, igual que el Cobre). Es el metal que da pie al grupo conocido como el de los metales de Platino en referencia al hecho de que aparece frecuentemente acompañado por éstos elementos de forma natural. Es más denso que el Oro y tiene puntos de fusión y ebullición mucho mayores. El Platino es parte de la familia encabezada por el Níquel (grupo 10 de la Tabla Periódica) y por ende se encuentra como ganga en la minería del primero, así como también en las explotaciones de Cobre. 


Resistencia a la corrosión

El Platino es un metal noble, ergo no reacciona con la mayoría de ácidos, aunque sí con el Aqua Regia, aunque más lentamente que el Oro y siempre que la temperatura sea moderadamente alta. Su resistencia a la oxidación es muy alta, no sólo por el Oxígeno propiamente dicho si no también por los Halógenos (el Flúor en estado gaseoso lo ataca a partir de los 400ºC) lo que permite valuar la resistencia de éste metal como alta o “muy alta”. La resistencia al Oxígeno es mayor, pues aunque forma el óxido a partir de los 500ºC  se puede revertir, el proceso de corrosión con los Halógenos es más complejo y suele resultar en la formación de las respectivas sales que no son fácilmente reversibles. El Platino puede ser trabajado en presencia de Oxígeno, justo como el Cobre, la Plata, el Oro, Estaño, Plomo y Bismuto, pero conseguir la temperatura de fusión es dificultoso (más de 1700ºC, superior al Hierro puro) por ende sólo algunos joyeros lo trabajan directamente. La mayoría de piezas de Platino, sean o no de joyería se producen mediante fundido al vacío o con atmósfera inerte, rara vez manualmente, en su lugar empleando máquinas especiales. Éste es el motivo que explica porqué la enorme mayoría de piezas de Platino son “sencillas”, como las alianzas de boda, si lo piensas bien no dejan de ser cilindros.


Aplicaciones típicas

Como no podría ser de otra forma, el Platino es el elemento más importante de su grupo, no en vano se llama “grupo de metales de la familia del Platino”. Es el elemento definitorio por excelencia, el más polivalente, caro y sin embargo fácil de trabajar (en comparación al resto de su familia, incluyendo al Paladio).


Los principales usos del Platino se parten en dos ramas principales:


-Uso como catalizador en la industria automovilística. Éstos catalizadores convierten gases de efecto invernadero altamente tóxicos en otros, que si bien también son peligrosos, lo son menos. A saber, Monóxido de Carbono en el Dióxido (CO > CO2), Hidrocarburos en vapor de agua (CxHx > H2O donde la “x” es una variable) y Dióxido de Nitrógeno en Nitrógeno elemental, Dinitrógeno molecular (NO2 > N2) que es inerte, no peligroso. 

-El segundo uso principal del Platino, como ya habrás anticipado seguramente no es otro que el de uso en joyería de lujo. Normalmente, el precio del Platino es mayor (o debería ser mayor) al del Oro blanco y rivaliza con el Oro alto (18k). Es extremadamente caro.


Otros usos del Platino son: en la industria química y en particular la petroquímica (refinerías), recubrimiento de contactos eléctricos, instrumental de laboratorio (es menos caro que el Oro puro), electrodos. También se considera un metal apto para monedas, aunque sólo se ha usado en ocasiones especiales, conmemorativas.