PVC
Nombre: PVC, Polivinilo, Vinilo
Nombre real: Cloruro de Polivinilo
Composición: C2H3Cl
Familia: Termoplásticos
Densidad: 1,38
Rango de temperatura admitido: -10º/70º
Propiedad de: B.F. Goodrich
El PVC es uno de los plásticos más populares del mundo. El tercero en volumen de producción anual desde hace décadas por detrás del Polietileno y el Polipropileno. Plástico muy duro y rígido, con excelentes propiedades mecánicas que facilitan su extrusión y modelado, trabajado en frío, et cétera. Una muy buena corrosión en medios acuosos de todo tipo y elevada tolerancia a productos de limpieza del hogar convierten a éste plástico en la referencia del sector de la construcción para confeccionar tuberías, coderas, anillas, roscas y demás material plástico en fontanería (plomería en Iberoamérica) como reemplazo primero del Acero y/o del Plomo. Es uno de los plásticos más completos.
La primera muestra de Cloruro de Polivinilo (en adelante PVC para abreviar) fue encontrada de forma accidental por el químico alemán Eugen Baumann en 1872 (convirtiéndolo así en uno de los primeros Polímeros sintéticos) aunque el plástico como tal se haría de esperar hasta 1926 cuando el empleado de la compañía americana B.F. Goodrich (actualmente Goodrich Corporation) Waldo Semon conseguiría un método para conseguirlo de manera masiva. Hasta el día de hoy y cada año más éste Polímero sintético continúa demostrando su gran utilidad al haber reemplazado en gran medida el Acero y el Plomo en las tuberías de las grandes ciudades. No es, desde luego, el único uso del PVC, pero quizás sí el más famoso.
Es un plástico de alta densidad, con una fórmula química idéntica a la del Polietileno, donde un átomo de cada cuatro de Hidrógeno es reemplazado por uno de Cloro de manera masiva formando largas cadenas (marcomoléculas). La presencia del Cloro tiene varios efectos. Provoca una dislocación en el plano C2H4 normal del Polietileno y otorga al PVC una mayor tenacidad, rigidez y dureza que pueden alterarse mediante la adición de plastificantes; esto es, segundas substancias que lo vuelven más flexible y plástico, valga la redondancia de la palabra.
En estado de máxima pureza es blanco y frágil, pero duro. Los niveles de flexibilidad que se buscan obtener dependen de la aplicación que presente la demanda, donde el PVC normalmente siempre cumple, en el sentido de que es capaz de servir y dar buena prestancia donde otros plásticos, si bien más baratos, no consiguen el efecto deseado, tales son los casos de otros Polímeros famosos como el PE y el PP.
Aunque la temperatura de fusión del PVC es relativamente alta, no se puede decir que tenga un margen de operaciones muy tolerante, térmicamente hablando. A partir de los 80ºC comienza a debilitarse, y de hecho es bastante sensible al calor.
La resistencia química es mejor a la de otros plásticos típicos y de hecho podría considerarse de las mejores, teniendo en cuenta su rango de precio. Puede soportar ácidos diluidos, bases no-concentradas, álcalis, sales (ejemplo: peróxido de Hidrógeno no concentrado), et cétera, siendo éste el motivo principal por el cual se usa para fabricar tuberías de todo tipo.
La rigidez del PVC puro es de las más altas entre su clase, y en ésta forma (de gran pureza) se utiliza incluso para partes estructurales (reemplazando al hormigón tradicional en secciones de poca responsabilidad/carga). Con la adición de plastificantes se vuelve más flexible y es un material popular para la elaboración de juguetes de alta calidad, más densos que las copias ilegales más baratas hechas con otros Polímeros.